Marbella Club rinde homenaje a su entorno y espíritu andaluz a través de nuevas experiencias gastronómicas diseñadas para celebrar

La gastronomía continúa brillando y siendo uno de los pilares de Marbella Club. Bebiendo de sus raíces andaluzas y su carácter mediterráneo y desenfadado, las experiencias que inundan el hotel van más allá de lo culinario, trasladándose a cualquier espacio, incluso en las propias villas, durante cualquier época del año.

El placer de disfrutar de cada rincón del hotel, acompañado de un concepto gastronómico único, en familia o con amigos, hace que sumergirse en este oasis de paz en plena “milla de oro” se convierta más que nunca en un plan imposible de rechazar. Así es como, a su ya conocida amplia oferta, se suma un nuevo concepto alrededor de cuatro nuevas temáticas, que inspiran día a día al hotel, con la gastronomía como eje principal. Destinadas tanto a huéspedes como a clientes externos, todas ellas pueden ser trasladadas a cualquier área del hotel. 

Este nuevo concepto, y tras la celebración, el pasado septiembre, del 90 cumpleaños del Conde Rudi von Schönburg, primer director general y figura fundamental dentro de la historia de Marbella Club, pone su broche con un exclusivo menú, que rinde homenaje a los platos favoritos del Conde, junto a algunas de las opciones gastronómicas más emblemáticas del Hotel a lo largo de los años. Además, este menú puede degustarse incluso en un rincón tan especial como es el antiguo torreón de agua y posterior despacho del propio Conde.

¿Qué encontraremos en cada experiencia?

Cada una de estas experiencias apuesta por un concepto diferente e inspirador, en línea con la filosofía de Marbella Club, que homenajea tanto a sus raíces como a destacados elementos de la naturaleza. Su objetivo es que tanto clientes hospedados en el hotel como clientes externos puedan aprovechar la gran variedad de espacios que ofrece Marbella Club, desde las zonas comunes hasta las propias villas y despertar los cinco sentidos.

Andalucía
El carácter y la visión internacional de Marbella Club se complementa a la perfección con sus orígenes y estilo de vida, fuente de inspiración del hotel en cada uno de sus rincones. Así es como la primera experiencia está dedicada a Andalucía y a sus tradiciones, en un ambiente tranquilo y relajado.



Con el objetivo de dar a conocer su riqueza gastronómica y cultural, “Andalucía” fusiona comida y bebida junto con música de acompañamiento y bailes tradicionales, al más puro estilo local.

Una pequeña dosis de sentimiento andaluz que, de la mano del chef Yahav, se traslada a la cocina, elaborando un menú especial basado en las tapas tradicionales de la zona, creado a partir de productos locales de temporada. Completando este guiño a la riqueza local, el chef ejecutivo Simón Padilla se encarga de preparar una paella, invitando a los asistentes a disfrutar de cada momento de su elaboración en primera fila. Por último, el mixólogo del Clubhouse pone el toque final, con la creación de cocteles para la ocasión.

Fuego
La importancia del fuego desde su descubrimiento y su fuerte papel en la gastronomía da nombre a la segunda experiencia. La temperatura, la iluminación, la forma de cocinar o el cambio de estado que provoca en la materia son algunas de las razones por las que esta experiencia rinde homenaje al fuego y a su transcendencia a lo largo de la historia.



De nuevo el chef Yahav ha sido el responsable de crear un menú especial para esta experiencia: platos cocinados en el fuego o a la parrilla.

Mar
De la mano de las raíces y la cultura local llega la experiencia enfocada al ‘Mar’, inspirada en los chiringuitos tradicionales de Málaga, en su gastronomía y en el ambiente acogedor y desenfadado que les caracteriza. Fue en estos locales donde nació la figura del espetero, al cual rinde homenaje esta experiencia, alabando un oficio que se transmite de generación en generación.

El chef Yahav, protagonista indiscutible de estas nuevas experiencias, ha diseño otro menú donde el pescado y, en concreto, el espeto, es, sin duda, el plato estrella de la carta, trasladando la mítica barca espetera a cualquier espacio.

Jardines
Por último, los jardines y la naturaleza son una parte imprescindible de Marbella Club, contando con más de 300 variedades de flora en sus 50.000 m2 que abarca el resort. Esta temática rinde homenaje a este espacio de cultivo y de cosecha de alimentos frescos como verduras, frutas y plantas aromáticas, que más tarde podrán degustarse en el plato.

Con el objetivo de transmitir los principios ecológicos de respeto a la tierra y al entorno cercano entre familia y amigos, la experiencia enfocada al ‘Jardín’ con productos locales y de temporada, cultivados en la propia huerta el hotel, incluye la degustación de los cócteles del mixólogo de la casa y jefe de bares, Nelson Gallo, basados en la magia botánica de las hierbas cultivadas en los propios jardines de Marbella Club.

Además, una de las curiosidades de esta experiencia es el fomento de la multifuncionalidad del material. Así, se emplean utensilios que están a nuestro alcance y se guardan para un segundo uso diferente: por ejemplo, una carretilla que fue utilizada para transportar la tierra del campo, se ve ahora transformada en una cubitera.

Menú con nombre propio
El menú Heritage Dinner es otra de las novedades que acerca el carácter cercano y familiar de Marbella Club al paladar de los huéspedes. Tras el 90 cumpleaños del Conde Rudi von Schönburg y la posterior presentación, el pasado 24 de septiembre, del libro dedicado a él, Un hombre afortunado, el Hotel continúa rindiendo homenaje a su figura.<

Para ello, ofrece la posibilidad de deleitar un exclusivo menú que combina los platos favoritos del Conde junto con clásicos gastronómicos del Hotel. Un menú que suma a la magia de su historia la posibilidad de hacerlo aún más especial, eligiendo el lugar perfecto para degustarlo dentro de Marbella Club, en espacios tan singulares como el antiguo Torreón de Agua, convertido posteriormente en el despacho del Conde, y que se transforma en una especie de cenador privado para la ocasión.

Con gran influencia del mar, uno de los hilos conductores del Hotel, este menú ofrece entrantes tan llamativos como el soufflé de queso a la crema, buey de mar en su concha, tartar de atún o una clásica ensalada con toque de bogavante con salmón y huevas de trufa. Entre sus platos principales se pueden encontrar langostinos salteados con espinacas a la crema y queso Gruyere, lenguado al champagne con langostinos, quenelle de rodaballo con salsa de marisco y hojaldre, o variedad de carnés, como carré de cordero asado o solomillo de ternera lechal con salsa de morillas y pasta fresca. El broche final viene de la mano de un delicioso soufflé Gran Marnier y de un “saquito” de manzana con helado de vainilla.